Imagen extraída de "ocdburgos"
Educar y educarnos
- Jaja, al verlo, Manuel, he recordado lo de que su Isabel le hace cosquillas y ya ve… no he podido reprimir la risa, jaja…
- ¡Mejor que ría y no se reprima! Un buen esposo/a son aquellos que ríen mucho y se reprimen lo justo.
- ¿Y qué es reprimirse lo justo?
- Lo justo para no humillar a tu esposa/o. Los hombres tenemos una mala estrategia. Cuando somos novios le decimos a la novia: “si me quieres todo lo que dices demuéstramelo…”. De casados: “Cariño eres mi esposa y yo tengo unas necesidades… ¡Un día me vas a obligar a irme a…”. Estas frases manoseadas y tópicas y típicas, son las que hay que reprimir y con amor arrancar del corazón. En el matrimonio lo único que obliga es a amar y a intentar hacer feliz a tu cónyuge.
- Pero hay mujeres que continuamente les duela la cabeza… ¡y usted me entiende!
- ¡Claro! Y el marido en vez de ser aspirina se enfurece y se convierte en un tirano hambriento, y no de comida precisamente. ¡El amor jamás puede esclavizar o ser tirano! Si el hombre tiene “mayores” necesidades, también puede “ir controlando sus instintos”. Somos muy educados con la gente, ¿y con la esposa? ¡Controla, controla, que un beso con ternura y amor vale más que mil … ya sabe usted a qué me refiero! ¡Y no soy anticuado o iluso por pensar así!
Compañera te doy no esclava. SI a tus hijos debes tratar muy bien, imagina como debes tratar a la madre de tus hijos. ¿Tratas a tu esposa/o como esclava/o?
Julián Escobar.
Vídeo de "Youtube"
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