“Nunca es demasiado tarde para ser lo que deberías haber sido” (George Elliot).
- ¿Culpas a Dios o a los demás de lo que podrías haber sido y no eres? No te auto-engañes, mientras vivas puedes “intentar” por lo menos, ser lo que dices que podrías haber sido. No serás campeón olímpico, ni astronauta si tienes 80 años, pero por lo menos “inténtalo”, no seas como el señor que le pedía a Dios que le tocara la lotería, pero nunca compraba un décimo.
El mal esposo culpa a su esposa.
La mala esposa culpa a su esposo.
El mal hijo culpa a sus padres.
El mal alumno culpa a sus profesores…
No gastes energías en buscar “culpables”. Examínate y cambia. ¡Piénsalo a lo largo del día!
Julián Escobar.
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