Imagen extraída de "blogs.hoy.es"
- ¿Te preocupa demasiado el futuro?
- ¿Cómo te preparas para afrontarlo?
Te recuerdo que tu Salvador, mi Hijo Jesús, “cayó rostro en tierra” en el Huerto de Getsemaní viendo su futuro inminente. ¡Tristeza sufrió, pero no desesperación! ¿Me crees tan mal Padre, que voy a permitir que se ponga sobre tus hombros más peso que el que puedas soportar? Tu Salvador, mi Hijo Jesús, te dejó escrito en el Evangelio: “astutos como serpientes y sencillos como palomas”. La astucia o la prudencia y la sencillez no son virtudes que se excluyan, sino que se complementan. La serpiente se desliza en el suelo, son tus pies en la tierra. La paloma se lanza por los aires, es tu corazón que piensa y añora el cielo. No vas hacia el futuro tú solo. ¡Yo, tu Dios, te acompaño! ¡Fuera miedos!
Julián Escobar.
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